lunes, 25 de agosto de 2014

Odio los viernes...



Te levantas cansado. Ves a tu mina dormir a raja suelta atravesada en la cama.  Miras la hora y piensas "¿Por que yo, por la chucha?".  Recuerdas la noche anterior.    Viernes de salir a conversar un ratito con los amigos, los cumpitas del trabajo, pensando animoso en el panorama que tienes junto a todo un fin de semana para descansar... Pero no, ahi estas, a las seis de la mañana, con los ojos pegados, los brazos lacios y con la tipica erección matutina en la cocina, preparando mamaderas con leche para el crío.

-¡¡¿Por qué estos engendros no entienden que el fin de semana es para descansar?!! -exclamas molesto mientras cierras el tarro de Nido con un manotazo.
-Amor, dejate de webear y prepara la mamadera luego porfa... ...no queríai salir ayer...   ...que andai webeando... maracas... -se siente un murmullo salir de la boca de tu señora la cual vuelve a babear entreabierta mientras sigue hilando frases ininteligibles.

Es el comienzo del caos.  La tortura incesante que comienza por el chillido agudo del niño que no está en el jardin-sala cuna y demanda insistente que le sirvan el desayuno a las seis y media de la mañana...       Le dejas la mamadera al chicoco que te la recibe amorosamente, en silencio, estirando sus deditos de pequeña uña rosada.   Lo miras con los ojos entrecerrados y no sabes si estas soñando o si estas despierto.    Vuelves a tu pieza.   Te sientas en la cama, agarras tu teléfono y miras la hora.    Ya son las seis y cuarto de la mañana.    Llegaste hace un par de horas y sientes como si hubiera sido hace cinco minutos.   Te acuestas de nuevo, cagado de frío.  Abrazas a tu mina que esta calentita y la sueltas de inmediato antes de que una patada te llegue en las canillas, o peor aun, en las bolas.

-Estai helao, correte!
-Puta, pero es que tengo frío po...
-No me wei, po...

Tu mina se da la vuelta, llevándose toda la frazada consigo.   Tu esperanza de entrar en calor a base de cucharita se ha extinguido a la vez que sientes el llanto salir con evidente estruendo, nuevamente, desde la pieza de tu criatura.

Al final, ya son cerca de las once de la mañana, y te quedaste raja durmiendo en la pieza del niño, cagado de frío, mientras éste mete sus deditos curiosos en los hoyos de tu nariz...

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Este es el típico inicio de una tortura de fin de semana.  O de un fin de semana en familia.

¿Quien dijo que los sábados y domingos son para descansar?  Los que tenemos hijos pequeños, sabemos perfectamente que los días de descanso no existen y casi todo lo que hacemos en un día libre, los involucra a ellos.   No respetan los feriados.  Tampoco les importa que vengai raja de curado de un cumpleaños.   Prácticamente ellos se desentienden de la situación y aprovechan con gozo que sus papás están en casa para regalonearlos con sus gritos, peleas, juguetes tirados, petitorios de golosinas y monitos del Cartoon Network (si es que tenis la suerte de tener tele por cable en la casa).

En lo personal, como mamá, anhelo esas horas de monotonía y rutina en la pega.  Momentos en los cuales puedo enfocarme en lo que estoy haciendo y no ando pendiente de los gritos ni de los pañales de las crías.    Momentos en los que puedo conectarme con ese YO interior que lo único que quiere, es que alguien le ayude a hacer las webadas en la casa cuando voy cansada y que desea con toda su alma, un tecito caliente, acostarse y dormir.

¿De verdad que a nadie mas le pasa que odia los días viernes por que comienza el caos, el griterio y la carcajada incesante y solo espera que llegue el tan amado lunes para poder descansar?  Por que ojo, el cuerpo necesita descanso, pero la mente también lo necesita.

Y que pasa con los quehaceres del hogar? Y el almuerzo? Y la ropa?...
Bueno, en mi caso solo queda organizar el tiempo en la semana haciendo un poco de estas labores, para tratar de tener un buen dia libre... pero por mientras tendre que seguir aguantando la alarma natural que dice "mamá, tengo hambre".

Hombres, tienen suerte.  La eternidad de la labor doméstica esta condenada a ser un tema netamente femenino gracias al machismo que nos rodea, así que por favor, los fines de semana, ayuden a sus parejas. ¡Ojala la ayuda apareciera a diario! O a sus mamás, ayúdelas también en caso que ustedes sean unos mantenidos que aun vivan del pulmón parental. No se queden echados rascándose las bolas mirando como se lava la ropa o se limpia el living. O cuando se hace el almuerzo.

Y tampoco se metan a la cama cuando están mas helados que la cresta, jajaja!

Sus minitas se lo van a agradecer con mejor animo y disposición para hacer cosas mas "interesantes".  

100% recomendado.






6 comentarios:

  1. Muy buena entrada, parece un post de desahogo total, y entre medio tienes toda la razón, yo no soy padre todavía pero cuando lo sea espero poder dar una mano también en las cosas de la casa a mi esposa para que pueda disfrutar también, al final las cosas son todos de a dos.

    Como consuelo te podría decir que a medida que creen los chicos se van haciendo más independientes si que si son pequeños aprovéchalos, te lo digo porque yo he compartido harto con mis sobrinos y los he visto crecer

    Que tengas un buen día de descanso Lunes, yo por el contrario estoy full trabajo, saludos!

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    1. Yo quiero que crezcan luego. Cuando sean grandes, querré que sean enanos otra vez xD Nadie me entiende, jajaja :D Saludos!

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  2. Yo creo que lo mas dificil es calentarse el cuerpo antes de acostarte de nuevo :(

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  3. alguna vez me llevé un de esas miradas que si pueden te castran...por pensar que era buena idea despertar con caricias a mi ..ex..polola....parece que muy temprano si... ok..findes son findes...anotado

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